Posted on / by admin / in ARTÍCULOS

5 SESGOS COGNITIVOS QUE AFECTAN LA TOMA DE DECISIONES COLECTIVAS

“El líder modela constantemente los principios y valores que promueve.”

Según Kahneman y Tversky, un SESGO COGNITIVO es: “un patrón de desviación en el juicio que se produce en ciertas situaciones, el cual causa una distorsión de las percepciones, juicios inexactos, interpretación ilógica, o simplemente lo que llamamos irracionalidad.”[1]

Cuando tomamos decisiones en equipo es útil reconocer que nuestras percepciones pueden estar distorsionadas. Veamos algunos ejemplos:

PRIMERO: Efecto de Arrastre La tendencia de seguir la opinión del grupo y su influencia incluso cuando esta vaya en contra de mis convicciones o de la realidad.

Bajo ciertas circunstancias, 3 de cada 4 personas darán respuestas que saben que son falsas con el fin de alinearse con el grupo que ha dado esa respuesta (mientras que menos del 1% respondería así sin estar bajo presión). Un estudio famoso que confirma este sesgo es aquel del ascensor donde actores contratados viajan en un ascensor dándole la espalda a la puerta y, las personas que entran, al ver esta conducta varias veces, comienzan a voltearse también sin saber por qué.

De modo que el liderazgo marca el comportamiento del grupo. Si los que dirigen ignoran la opinión de asociados, por ejemplo, o muestran favoritismo hacia ciertos individuos, los empleados no se atreverán a disentir de sus jefes ni osarán proponer ideas originales. De hecho, podrían acostumbrarse a acciones que en otro tiempo no hubieran tolerado. El líder dicta la cultura organizacional.

SEGUNDO: Falso Consenso la tendencia a creer que más gente está de acuerdo con nosotros que la que realmente lo está.

Muchos líderes se enfocan tanto en sí mismos y están tan apasionados con sus propuestas, que ignoran el desacuerdo que su equipo siente cuando les presenta una idea y el grupo no se atreve a disentir. Si el líder es dominante, el equipo puede pretender estar de acuerdo y seguir las instrucciones recibidas, a pesar de estar en desacuerdo y considerar que esa ruta es errada.

¿Cómo lo evitamos? Alentando la participación y discusión, haciendo preguntas simples y escuchando atentamente como, por ejemplo: “¿qué podría salir mal bajo esta perspectiva?” o “del 1 al 10, ¿cuántos puntos le dan a esta idea?” (y si alguien responde que le da 8, le preguntamos: “¿qué le faltaría para ser un 10?”). Esta discusión puede generar nuevas ideas y exponer riesgos que no estábamos viendo.

TERCERO: Sesgo de Proyección Muy alineado con el Falso Consenso está el sesgo de Proyección, en cual consiste en asumir que otros piensan como nosotros.

He visto presentaciones de negocios desplomarse en los primeros minutos simplemente porque al plantear sus premisas, al inicio de la reunión, la audiencia estuvo en desacuerdo con éstas y comenzó a disparar preguntas retadoras y a discutir. Esperar que todos vean lo que vemos nosotros y como lo vemos nosotros es un error. Un buen principio es asumir que siempre alguien de tu audiencia va a retar activamente tu propuesta. Eso te ayudará a prepararte mejor.

Hay otro aspecto del Sesgo de Proyección que mostramos cuando creemos saber lo que la gente piensa, sin validarlo. Aserciones como “yo conozco a mis clientes” o “lo único que los empleados quieren es aumento de sueldo” deben ser primero validadas con preguntas genuinas y a través de la escucha activa.

CUARTO: Sesgo de Supervivencia Tendemos a centrarnos en las cosas que salieron bien en un proceso mientras pasamos por alto aquellas que pudieron hacerse mejor.

Generalmente cuando celebramos el éxito, tendemos a regocijarnos en el logro, a disfrutar de la adrenalina. Nada malo con eso. Sin embargo, es bueno tomar un tiempo también para repasar todo el evento, evaluar objetivamente lo que falló, e identificar aquello que pudo haberse hecho mejor. Esa no es una actitud desmoralizadora sino la búsqueda constante de la excelencia.

QUINTO: Efecto “como yo” Tendencia a valorar más y darle mayor reconocimiento a quienes piensan del mismo modo que nosotros.

A todos nos agradan los que están de acuerdo con nosotros. Es simple naturaleza humana; sin embargo, debemos intentar neutralizar este sesgo para tomar decisiones importantes. ¿Qué tal si intencionalmente nos tomamos el tiempo de escuchar atentamente las opiniones que se oponen a las nuestras? Refrenemos el instinto natural de menospreciar las voces opuestas, aunque vengan de personas de menor experiencia, jerarquía o de otra área. Regalémosle a nuestros oponentes empatía: “la capacidad de reconstruir en nuestro interior los estados mentales de los demás…”[2]

Una crítica es un pedazo de carbón que bien examinado, se vuelve diamante.

TIPS PARA MINIMIZAR EL SESGO EN TOMA DE DECISIONES COLECTIVAS

  • Lo primero es concientizarte de que todos tenemos sesgos, incluso tú
  • Al iniciar una reunión donde se vayan a tomar decisiones, invita a un miembro de tu equipo a que presente un resumen sobre 2-3 sesgos cognitivos durante unos minutos, y abran una corta discusión de como minimizarlos. De esta forma generas conciencia y educas a tu gente
  • Promueve la crítica constructiva y que “…está bien estar en desacuerdo”

Resumiendo tenemos:

  • Efecto de Arrastre: La tendencia de seguir la opinión del grupo
  • Falso Consenso: creemos que más gente está de acuerdo con nosotros que la que realmente lo está
  • Sesgo de Proyección: Asumir que otros piensan como nosotros
  • Sesgo de Supervivencia: Centrarnos en lo que salió bien e ignorar lo que no
  • Efecto “como yo”: Tendencia a valorar más a los que piensan como nosotros

Y para cerrar tengo uno irónico: Sesgo de Sesgo. Cuando alguien está plenamente convencido de que los sesgos no me afectan.

Para preguntas o sugerencias de temas puedes escribirme a contacto@eduardovillegasoficial.com o coachingexpansivo@gmail.com

También puedes visitar mi página www.eduardovillegasoficial.com

[1][1] 1.Kahneman, D.; Tversky, A. (1972). “Subjective probability: A judgment of representativeness”. Cognitive Psychology

 

[2] Revista Online Psicología y Mente Los 4 tipos de empatía (y sus características) (psicologiaymente.com)

Deja una respuesta